El bioplástico es un material procedente de productos vegetales, que puede utilizarse como alternativa al plástico procedente del petróleo. ¿Una falsa buena idea?

Sabemos que el plástico es una verdadera lacra: no es biodegradable, interfiere en todos los niveles del ecosistema y su reciclaje constituye un verdadero dolor de cabeza. ¿Qué pasaría si luego sustituyéramos todo este plástico por “bioplástico”, este plástico de origen vegetal procedente de recursos renovables? Una idea casi imposible y no tan ecológica.


Bioplástico: la falsa buena idea

Si el problema del plástico reside en su reciclaje, también podríamos fabricar un material plástico biodegradable: ya no surge el problema de dejar residuos en la naturaleza. Es un poco más complicado que eso.

Bioplástico, ni orgánico ni plástico

El bioplástico está mal denominado: no proviene de la agricultura ecológica, sino de la biomasa: subproductos agrícolas, procesamiento de la madera, algas, etc. Además, el término “bioplástico” abarca varios tipos de materiales: materiales de origen biológico (de plantas), materiales biodegradables pero que pueden derivarse del petróleo; Además, no todos los bioplásticos son biodegradables. Difícil de seguir…